Fotografías por Natalia Salazar
El trabajo de oficina obliga al cuerpo a posicionarse de muchas formas incorrectas, llevando un exceso de peso algunas articulaciones, por largos períodos de tiempo, creando adaptaciones en la postura, que con el paso del tiempo generan dolores muy intensos. Entonces, ¿Cómo debemos colocarnos en el escritorio?
1- Monitor de frente a los ojos
Mientras más horizontal logremos mantener la mirada, menos tensión se va a generar en los músculos del cuello, tanto en los profundos como en los superficiales, esto nos aleja de dolores de cabeza y de cuello.
2- Brazos y piernas
En la medida de lo posible, es importante que los brazos y las piernas formen un ángulo de 90, esto permite que las articulaciones de los hombros y las caderas no soporten peso de mala forma.
3- Evitar estar sentados largos periodos.
Mientras más tiempo pasemos sentados, más cortos se van a hacer los músculos que no ayudan a estar sentados. Los desbalances musculares que se generan al estar sentados, puede afectarnos diferentes partes del cuerpo, como el cuello, la espalda baja, provocando dolor e incomodidades. Se recomienda cambiar de posición cada hora, permitiendo al cuerpo oxigenarse y llenar de sangre oxigenada las partes que han estado bajo presión.
4- ¡Movete!
Existen pequeños cambios que pueden marcar la diferencia, dejar de usar el ascensor, hacer una pequeña caminata después del almuerzo, hacer estiramientos básicos cada cierto tiempo, son algunos ejemplos que podés tomar como motivación para acercarte a un estilo de vida más saludable. Los períodos largos de inactividad, a través de los años, generan muchas alteraciones que el cuerpo necesita compensar. Es muy fácil evitarlas, ¡buscá moverte todo lo que podás!
5- Puntos de presión
Este punto va dirigido a las manos, el mouse, la posición de la mano sobre el teclado, son enemigos para sus manos, la presión que se genera por largos periodos, son predisponentes al Síndrome del Tunel Carpal, tratá de hacer estiramientos para tus brazos, y tus manos, utilizá alarmas o recordatorios que te permitan cambiar tus manos de posición.