Semana Santa es una de las semanas en que además de las tradiciones alusivas a la celebración de la cuaresma, muchos aprovechan para irse de paseo, en su mayoría, los ticos prefieren la playa como su destino de descanso, el clima de esta época favorece el disfrute a la orilla del mar. Una de las “metas” de muchos y muchas es broncearse la piel y aparte de asegurarte de utilizar un protector solar adecuado y exponerte a las horas menos dañinas, podés ser intencional en los alimentos que consumas para alimentarte de forma saludable favoreciendo el bronceado en tu piel.
1.Consumí frutas y vegetales de colores vivos:
Los colores rojos, naranjas, amarillo intenso y verde oscuro contienen betacarotenos que son los precursores de la vitamina A que protege la piel de la radiación solar y el envejecimiento celular, además mejora la tersura de la piel.
Por otro lado las frutas como los cítricos, la guayaba, el kiwi, la mora, la piña y la fresa, y los vegetales como los berros, las coles, los tomates y chile dulce, son ricos en vitamina C, encargada de reforzar el sistema inmune y si sos intencional en consumirlos también ayuda a tener la piel más luminosa por sus antioxidantes.
Este tipo de alimentos, en especial el tomate estimulan la producción de melanina, el pigmento que se encuentra en algunas células del cuerpo y es el responsable de absorber la UVB. Con estos UV rayos se produce una reacción química que oscurece la piel.
2. Preferí el pescado como fuente de proteína:
En especial los pescados azules como el atún, la caballa, el salmón, las sardinas y las anchoas son una fuente de proteína rica en ácidos grasos Omega- 3, los cuales tienen la función de proteger a la piel de la deshidratación por la exposición al sol, además que funcionan como agentes antiinflamatorios por si sufrís alguna reacción como dermatitis muy común al exponerse al sol más de lo normal.
3. Incluí la vitamina E como ingrediente intencional:
Los alimentos que la contienen en más cantidad como la yema de huevo, el maíz, el germen de trigo, el aguacate y los aceites como el aceite de oliva o girasol, deberían estar presentes como parte de una comida completa o como un acompañamiento en tu dieta diaria ya que la vitamina E se encarga de equipar de antioxidantes que protegen tu piel y favorece la cicatrización.
4.No te separés de tu botella de agua y mantente hidratado:
No puede haber una piel bonita sin agua. Al hidratar la piel desde dentro, evitas la descamación o “despellejarse, además de evitar las arrugas en la piel. Asegúrate de tomar al menos 1 litro de agua pura (preferiblemente fría para regular tu temperatura corporal, si la del exterior está muy elevado). Podés hidratarte con agua, té verde y jugos de frutas y vegetales de colores vivos.
5. Procurar variar tu menú para consumir suficientes minerales:
Los minerales (azufre, zinc, selenio y manganeso) te ayudarán a cicatrizar las heridas y quemaduras, retardar el proceso de envejecimiento, reforzar el sistema de defensas y mantener una piel y unas uñas sanas.
Además consumí alimentos ricos en potasio ya que al exponerse al sol es mucho más común que te deshidrates. Estos minerales los podes encontrar desde en un bebida refrescante como agua de pipa hasta mariscos (en especial las ostras), leche y derivados, remolacha, hongos, pera, manzana, germen de trigo, nueces, legumbres, arroz y maíz.
Fotografías por Natalia Salazar