Es una meta de muchos este año es cuidar nuestro peso corporal, del cual un sector grande quiere específicamente perder esos kilos de más, acumulados desde hace algunos meses o incluso años. Para lograr esta meta hay cualquier cantidad de consejos y formas de lograrlo en cortos periodos. Porque un común denominador de quienes vivimos en el siglo XXI es que nos cuesta mucho esperar, nuestra paciencia se ha reducido a esperar hasta 1 minuto para que se caliente el almuerzo en el micro o para recibir una respuesta a un mensaje de celular, queremos todo “ya”, mientras más rápido mejor, cada minuto ha ganado plusvalía de tal forma que si nos dieran una clave para lograr nuestras metas anuales en meses estaríamos dispuestos a pagar lo que sea.
Existen muchas “recetas” y guías para perder peso, desde dejar las harinas, sustituir tiempos de comida por algún batido o pastilla, eliminar el azúcar, por mencionar algunos de los consejos más populares, que nos dejan con a duda de ¿cuál será más confiable?, ¿cómo puedo perder peso rápidamente? Existe una manera muy confiable para perder peso, pero con una condición especial, y es que para tener éxito aplicándola hay que tener paciencia, hay que entender que si solo sigo una receta pero no cambio realmente mis hábitos de alimentación la garantía de conservar el peso corporal alcanzado luego de la dieta se reduce, además que la velocidad que prometen algunos métodos para reducir medidas ponen en riesgo tu salud.
Las dietas para perder peso en poco tiempo si se siguen al pie de la letra te van a ayudar a lograrlo pero si te descuidas al terminarla, rápidamente podrías recuperar todos los kilos que perdiste sumándole unos cuantos más. Esto se conoce como efecto rebote, una consecuencia de las dietas instantáneas con las que luchan muchas personas que se someten a una dieta o método restrictivo.
La idea de este artículo no es desanimarte, todo lo contrario, animarte a convertir esas ganas de perder peso en un estilo de vida para cuidar de tu salud siempre. La velocidad con que alcances tus metas va a depender de tu paciencia, determinación y perseverancia. ¿Cómo puedes comenzar el proceso? Lo ideal es realizarte una valoración nutricional completa para que puedas fijarte metas a corto, mediano y largo plazo partiendo de tu estado nutricional actual (tomando en cuenta tu % de grasa corporal, masa muscular y no únicamente tu peso), además que un profesional en nutrición puede analizar y recomendarte aquellos aspectos que deberías modificar de tu alimentación.
Algunos puntos importantes para que comencés a analizarte son:
- ¿Tenés un horario de comidas, cuántas comidas realizas en un día? Lo ideal es que comás cada 3 horas: desayunar, almorzar, cenar y hacer meriendas entre cada uno de estos tiempos.
- ¿Tomás agua? ¿Cuánta? Necesitas mantenerte hidratado porque también la sed puede legar a confundirse con hambre y para mantener un metabolismo acelerado. Toma al menos 4 vasos de agua pura y otros 4 vasos de líquidos como jugos, frescos sin mucha azúcar o leche.
- ¿Cuántas horas duermes por noche? Es importante que duermas entre 6 y 9 horas, ojalá de noche, porque dormir bien también te va a ayudar a acelerar el metabolismo.
- ¿Comés frutas y vegetales todos los días? Comer al menos 2 frutas en el día (en las meriendas por ejemplo) y vegetales en el almuerzo y cena te va a garantizar una adecuada nutrición ya que estos están ricos en vitaminas, minerales, antioxidantes que protegen tu organismo y sobre todo te aportan pocas calorías, ideal para cuando quieres perder peso.
- ¿Consumís mucha azúcar en el día? El azúcar solo nos aporta calorías vacías que no nos van a permitir quemar la reserva de energía cuando queremos perder peso, por lo tanto es importante disminuir su consumo, o evitarlo en algunos casos.
- ¿Cuáles son los métodos de preparación que más se utilizan para cocinar los alimentos que frecuentemente consumes? El método más común es la fritura pero este solo añade calorías de grasa a tu preparación, y si quieres perder peso lo ideal es que tus alimentos sean preparados a la plancha, al horno, al vapor, hervidos o en ensalada o ceviche.
- ¿Realizás ejercicio? Si la respuesta es no, tenes que empezar por buscar alguna actividad física que te guste y que vayas a practicar constantemente. Un cambio en hábitos de alimentación acompañado de ejercicio es la mejor forma para perder peso y cuidar tu salud.
Fotografías por Natalia Salazar