Por Estefanía Vargas, Psicóloga & Integrative Health Coach
Si te parecés a mí, has vivido años y años en una relación amor-odio con el ejercicio y el deporte, pero no entendés por qué. Después de mucho trabajo personal, es algo que sigo sanando en mi corazón pero que ahora vivo con muchísima más paz y gozo (y si yo pude todas podemos, ¡yay!).
Hace años nada raro era verme haciendo ejercicio o hablando de fitness -pero siempre con un sentimiento de peso, culpa, casi que de hipocresía… Hasta que llegó el día en que estaba honestamente harta de vivir atormentada por el tema, y empecé a cuestionármelo todo.
Todo este revolú me ayudó a darme cuenta de que yo estaba etiquetando, enfocando y sobre-analizando mi relación con el ejercicio. “Amor-odio”. Notá que la expresión ‘amor-odio’ de una vez pone el 50% del peso en el odio, separándonos del amor, que es la fuerza desde donde queremos vivir nuestra vida.
Entonces decidí darle la vuelta a la tortilla y pasé de amor-odio a amor propio. En lugar de poner el foco en mi relación con el deporte y lo confusa que era, empecé a ponerle atención a mi relación conmigo misma: mi cuerpo, mi movimiento, mi intuición, mi alimentación, mi confianza, mis emociones, mis pensamientos… Aaaahhh, y eso sí me dio mucha más información para entender qué estaba pasando. La relación amor-odio era hacia mí, y quería que eso cambiara.
A partir de ahí empezó una exploración interna que me hizo entender que ir al gimnasio, practicar algún deporte o en sí conectarme con mi cuerpo, me generaba muchísima vergüenza, ira, miedo e inseguridad. ¿Por qué? Porque no había desarrollado mi sentido de valía, ni tenía a Estefanía integrada como un todo: mente, alma, cuerpo, espíritu, corazón estaban cada uno por su lado, sufriendo. Me encontraba fijada en todo lo que “estaba mal” en mí, perdiendo de vista la maravilla que era estar viva, tener un propósito, amar, comer, moverme, ser.
VER MÁS ARTÍCULOS DE BIENESTAR
Así que quiero darte tres ideas para que el deporte sea una herramienta para fortalecer la relación más importante de tu vida, y no un elemento que añada ansiedad a tu corazón:
- DALE PROPÓSITO: Más allá de un logro estético (¡lo cual es totalmente válido!), dale al ejercicio un propósito trascendental. Movete porque te trae gozo, porque moviliza tu energía, porque te recuerda que sos un ser increíble que tiene un espacio en este mundo. Movete porque anhelás amar a tus seres queridos por muchos años más, disfrutándolos con salud y bienestar. Movete porque querés trabajar en lo que te apasiona y sentirte bien y fuerte mientras lo hacés. Movete porque querés llegar a cumplir 90 años y estar en todas. Movete porque tu cuerpo es tu instrumento, no tu enemigo; tu amigo, no tu verdugo, porque te permite vivir y dar tu luz a los demás.
- CONOCETE MÁS: Van a haber días que vas a tener todas las ganas de ejercitarte, van a haber días que no. Escuchá a tu cuerpo, si necesita descanso dáselo – el descanso es parte de quererte bien y de cuidarte – pero si lo que está pasando es que tu crítica interna te esté jugando una mala pasada, y te está auto saboteando haciéndote sentir culpable, entonces es necesario escuchar a tu corazón, a tu intuición. Mi consejo: Tomá una libretita y convertila en tu diario de amor propio, usala para esos momentos de confusión. Escribí cómo te estás sintiendo, y cómo te sentirías si movieras tu cuerpo, si fueras al gym o a correr… Explorá de dónde viene la resistencia. Generalmente viene de la inseguridad, así que date una ducha de amor propio y escribí lo maravillosa que sos. Esos recordatorios de seguro te levantan de cualquier bajonazo – además de que este proceso te va a ayudar a conocerte mucho mucho más, preparándote para futuras batallas.
- RESPONSABILIZATE: Sólo vos tenés el poder sobre tu bienestar, paz, salud, felicidad y amor propio. No sos víctima de tu pasado ni de tu presente. Responsabilizate. Vos podés hacerlo. Creétela.
Y para finalizar, como dijo Katie Goulet: “Workout because you LOVE your body, not because you hate it”.
Sobre el autor:
Estefanía es Psicóloga, máster en Terapia Familiar y certificada como Health Coach por el Institute of Integrative Nutrition de Nueva York.
Los temas que le encantan son amor propio, bienestar integral y cómo vivir con plenitud y gozo. Por medio de su blog ‘Yes, my heart!’ comparte sobre estos temas para conectar con muchísimas personas que, como ella, quieren elevar su consciencia para tener paz interior, una conexión más profunda con su intuición y una vida basada en el amor y la abundancia. Su visión es que en comunidad es más fácil aprender a ser felices.
Website: www.yesmyheart.com Email: hola@yesmyheart.com
: /estefania.yesmyheart
: @estefania.yesmyheart
: estefania.ymh
: @estefania.yhm