Fotografías por Natalia Salazar
Costa Rica es el mayor productor de este vegetal tan saludable y versátil, y se consigue casi todo el año, por lo que su precio siempre es relativamente cómodo. Es uno de mis favoritos por su versatilidad y sabor. Aquí, se le llama chayote pero se le conoce con nombres diferentes: güisquil, pataste, cidra, papa del moro, papa del aire o tayota, en otros países.
¿Cuáles son las razones por las deberías comer chayote?
- Te aporta sustancias nutritivas
Es un vegetal rico en antioxidantes y vitamina C, A, B, Tiamina, Riboflavina, Niacina, ácido áscorbico, potasio y calcio; es bajo en calorías y contiene bastante agua. Este vegetal es rico en 7 de los 9 aminoácidos esenciales que participan en ciertas funciones de nuestro organismo como formación de colágeno, o controlar la ansiedad y el estrés.
- Es un diurético natural
El consumo del Chayote mitiga la retención de la orina y el ardor al orinar cuando se disuelven piedras del riñón bajo ciertos tratamientos. Por su contenido de potasio es una buena opción para consumirlo.
- Te ayuda a bajar de peso
Aporta muy pocas calorías a la dieta, una taza de chayote cocinado no te aporta más de 50kcal, no contiene colesterol ni grasas saturadas. Y además, es una excelente fuente de fibra dietética, una excelente adición a cualquier platillo si lo que buscas es cuidar tu peso corporal.
- Te evita y ayuda con problemas gastrointestinales
Su alta cantidad de fibra dietética también evita problemas digestivos como el estreñimiento y el síndrome del intestino irritable ya que ésta añade agua a las heces y las hace suaves, además de que promueve los movimientos continuos del intestino.
- Mejora tus niveles de colesterol
El chayote no contiene grasa de ningún tipo, y su fibra soluble se adhiere al colesterol y facilita la eliminación de éste nuestro organismo. Se ha demostrado que el chayote disminuye los niveles de colesterol malo y al mismo tiempo incrementa los niveles de colesterol bueno.
Formas en las que podes incluir el chayote en tus comidas:
- Crudo: Por ejemplo en julianas o bastones con limón y sal (sí como el mango pero su sabor es más suave y refrescante) o rayado en la ensalada o incluso agregarlo a un batido.
- Cocinado: Puede ser en sopas, picadillos con maíz otros vegetales o carne, en guisos, rellenos, envueltos en huevo, en puré, asados o al horno.
- En infusión: Con sus hojas podés hacer infusiones en especial por su efecto diurético.
- En preparaciones dulces: Podés utilizarlo para aumentar el volumen de una mermelada, miel o jarabe sin añadirle muchas calorías.
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Cómo se asé el licuado de chayote para el síndrome de intestino irresponsable y adelgazar